Los indicadores de violencia pueden mostrarse de muy distintas formas e intensidades, algunos de ellos pueden ser: 

• Querer saber lo que hace, dónde y con cuáles personas se encuentra su pareja todo el tiempo. Pedir hacer video llamadas, la ubicación en tiempo real y fotos como forma de comprobar donde está.
• Opinar sobre la ropa que usa la pareja, la forma de hablar, o la circulación por determinados lugares. 
• Limitar el uso el celular y las redes sociales, solicitar las contraseñas personales como prueba de “no hay secretos” en la relación. 
• Prohibir, amenazar o manipular con respecto al estudio, el trabajo, las actividades o las relaciones que desarrolla la persona. 
• Insultar y burlarse del cuerpo, la identidad étnico racial, la identidad de género de la pareja.
• Limitar y tratar de cortar la relación que tiene con la familia, las amistades.
• Peleas y reconciliaciones sucesivas 
• Amenazar constantemente. 
• Agresiones físicas, tirón de pelo, empujones, cachetadas, mordeduras, estrangulamiento, golpes de puño. 
• Tocar, besar, acariciar o realizar prácticas sexuales sin su consentimiento o bajo amenazas. Presionar, manipular, obligar a mantener relaciones sexuales. 
• Controlar o prohibir el uso de métodos anticonceptivos. 
• Chantajear y/o amenazar con difundir contenido íntimo (videos, fotos, chats, audios) aunque estos hubieran sido obtenidos en el marco de la intimidad del noviazgo y con consentimiento en su momento. 
• Filmar, tomar fotografías durante las relaciones sexuales sin consentimiento.