EN TODOS LOS CASOS: 

• Recuerda que del otro lado de la pantalla siempre te encuentras con una persona como vos, a la que respetar y tratar bien.
• Asegúrate de conocer las opciones de seguridad y de privacidad de la web/red social/chat/aplicación que utilices para entablar conversaciones sexuales, producir o compartir material sexual gráfico propio.
• Nunca compartas tus contraseñas con otros, ya sea una pareja, amigos, o desconocidos. 
• No siempre podemos controlar el alcance de lo que compartimos en internet, por lo que debes pensar cuidadosamente lo que compartes. 
• Recuerda que toda opción de seguridad que brinde la plataforma que utilices puede ser burlada: hasta una foto o video efímero, de una aplicación que no permite la captura de pantalla, puede ser grabada y reproducida luego.  
• Si miras pornografía, recuerda que puede ayudar a desarrollar la fantasía y el placer, pero como es una ficción intenta evitar comparar tu sexualidad con lo que veas, porque no representa ni los gustos, ni los deseos, ni los cuerpos, ni las relaciones sexuales de la mayoría de las personas. ¡Es fantasía y ficción!

CON PERSONAS QUE CONOCISTE ONLINE: 

• No compartas información personal o que permitan ubicarte en perfiles públicos. No des imágenes ni información íntima o comprometedora a nadie que no conozcas, ni la tengas al alcance de otras personas. No envíes información de otras personas, aunque te llegue por casualidad, ya que puede generar burlas, humillaciones y una viralización rápida e incontrolable, con consecuencias negativas en la salud mental de las personas.
• Si decides encontrarte con un desconocido con el que entraste en contacto de forma online, recuerda compartir tu ubicación con alguien de tu confianza, que sepa en donde estás en cada momento. No accedas a llevar a cabo un encuentro hasta no estar seguro de que la persona con la que te comunicas es quien dice ser, y recuerda que siempre es mejor encontrarse en un lugar público.